Os confieso que me encanta el invierno, creo que no hay nada más agradable que una tarde de domingo en casa, disfrutando con la familia, al resguardo del frío o de la lluvia. Y, aunque a priori, esta estampa se vea muy idílica, lo cierto es que, si los niños no están muy por la labor de quedarse en casa, una tarde entera con ellos encerrados, puede llegar a suponer un verdadero dolor de cabeza. Por eso, en estas líneas, os propongo 7 actividades que conseguirán hacer una tarde muy especial para los niños.
1. Disfrazarse y hacer un pequeño teatrillo
A la mayoría de los peques, les encanta disfrazarse y tienen en casa desde trajes de Lady Bug a la armadura de Iron Man. Seguro que si les proponemos que se disfracen y nos hagan un teatrillo, les mantendremos entretenidos gran parte de la tarde porque, por supuesto, antes de salir a escena, ¡tienen que ensayar!.
2. Juegos de mesa
Desde los clásicos parchís y oca a otros más modernos como el Monopoly electrónico que ya no usa dados manuales, cualquier juego de mesa para niños, siempre que sea adecuado para la edad de los peques, será perfecto.
3. Tarde de peli, sofá y manta
El plan que nunca falla, si además acompañamos la película con unas palomitas y unas chuches, tenemos el éxito garantizado.
4. Videojuegos y consolas
Si nuestros niños son un poquito más mayores, quizás nos podamos plantear una actividad que a ellos les guste más como jugar un ratito con ellos a la consola mientras nos tomamos unas pizzas con un refresco.
5. Hacer manualidades
Unas cartulinas, rotuladores lavables, ceras y témperas y podremos hacer con ellos máscaras, sombreros e inclusos disfraces completos con los que más tarde podrán seguir jugando. Las manualidades con hueveras de cartón o las manualidades con rollos de papel son perfectas.
6. Dibujar mandalas y hacer pasatiempos
Si a nuestros niños les gustan las actividades tranquilas, os recomiendo que siempre tengáis en casa libros para colorear, mandalas y pasatiempos adaptados a su edad porque son el recurso ideal para cualquier situación que empieza a descontrolarse.
7. Cocinar
A los niños les encanta hacer lo mismo que los adultos, estoy segura de que si les proponemos hacer unas galletas o un bizcocho, disfrutarán manchándose las manos con la masa y se sentirán orgullosos de los buenos cocineros que son.
Como veis, tanto si decidimos quedarnos en casa como si es algo que nos viene impuesto por las circunstancias, lo importante es animarse a pasar una tarde entretenida con los peques y crear unos recuerdos preciosos que nuestros hijos guardarán en su memoria para siempre.
Buen día a tod@s!!