Los juegos de mesa no solo sirven como diversión para nuestros niños sino que además son altamente educativos. En el caso del dominó, el juego les enseña las nociones básicas de las matemáticas. Sin embargo, sus beneficios van mucho más allá. Hoy hablamos sobre el dominó y las ventajas que tiene en los niños.
Dominós divertidos para los más pequeños
1. Dominó de Mickey Mouse

A los niños les encantan los personajes de sus dibujos animados y uno de los favoritos de todos es Mickey. Con el Dominó Disney de Mickey y Minnie nuestro hijo se sentirá atraído por las imágenes de la divertida serie y aprenderá a relacionar las que son iguales.
Una opción perfecta para enseñar las reglas del juego a nuestro hijo de 3 años ya que no contiene números que le dificulten jugar. Y no debemos preocuparnos por el tamaño de las piezas, pues son grandes para evitar accidentes y su material es madera sin ningún componente tóxico.
2. Dominó Gigante
Otra excelente opción para iniciar es el Dominó Gigante Goula de Animales. Sus piezas son de 14 x 6 centímetros con dibujos divertidos de los diferentes animales de la selva. Con él, el pequeño no solo aprende a jugar dominó y asociar parejas sino que además aprende los diferentes nombres del reino animal.
3. Dominó de figuras y puntos
Por último, tenemos un dominó para que nuestro hijo pase de relacionar figuras a relacionar números. Por un lado, tiene dibujos coloridos de animales como los anteriores y en su reverso puntos de colores para jugar igual que con un dominó clásico. El Dominó Diset de Animales y Puntos es una excelente opción para que aprenda a contar y desarrolle su memoria.
¿Qué es el dominó?

El dominó es un juego chino de origen milenario que con el paso del tiempo se ha popularizado en todo el mundo. Actualmente es uno de los juegos de mesa favoritos de las familias ya que ayuda a los integrantes a divertirse juntos.
Puede jugarse en pareja o en cuarteto y los participantes van desde niños de tres años de edad hasta adultos. El objetivo del juego es relacionar las piezas con sus pares de números, figuras o colores. Gana quien se quede primero sin piezas.
Beneficios del dominó en los niños
El dominó aporta a nuestro niño una serie de ventajas en el desarrollo de las habilidades cognitivas y otras relacionadas con los lazos afectivos como las siguientes:
- Desarrollo de la memoria: para aprender el juego es necesario que el niño conozca las reglas y las memorice. También es necesario que recuerde que piezas ha jugado cada participante para anticipar la jugada de los demás.
- Aumenta su concentración: los niños deben pensar una estrategia de juego y tomar en cuenta las piezas usadas por los otros jugadores antes de jugar ellos. Es un ejercicio que requiere mucha concentración por parte del pequeño.
- Aprende a contar: ya sea que nuestro hijo juegue al dominó clásico o de figuras, la mecánica es la misma. Él necesita conectar las piezas con la misma cantidad de objetos que deben ser contados.
- Lo ayuda a resolver problemas: después de acostumbrarse al juego, nuestro hijo nota que sus contrincantes no usan algunos números o fichas. Por esa razón deduce cuáles son y las usan para tener ventaja sobre ellos.
- Mejor desarrollo de la psicomotricidad: nuestro hijo necesita ubicar las piezas una detrás de la otra y para ello relaciona sus pensamientos y el movimiento de sus manos. El dominó le sirve de práctica para coordinar sus ideas y acciones.
- Crea lazos afectivos: al compartir con nuestro hijo se generan lazos de cariño que refuerzan las relaciones padres e hijo. De igual forma, el dominó es un juego perfecto para que los niños comiencen a conocerse en el preescolar y crear amistades.
Cómo jugar al dominó con nuestro hijo

Las reglas del dominó clásico son muy simples y se aplican para todos los tipos de juego. Aquí explicamos cómo divertirse jugando con nuestro hijo.
El dominó clásico consta de 28 piezas rectangulares divididas en dos partes. Cada una contiene un número de puntos que van del 0 al 6 y forman las siguientes combinaciones:
0-0, 1-0, 1-1, 2-0, 2-1, 2-2, 3-0, 3-1, 3-2, 3-3, 4-0, 4-1, 4-2, 4-3, 4-4, 5-0, 5-1, 5-2, 5-3, 5-4, 5-5, 6-0, 6-1, 6-2, 6-3, 6-4, 6-5, 6-6.
Pasos para jugar
- En el dominó de cuatro jugadores los niños se sientan en una mesa cuadrada uno a cada lado o en el suelo de forma que cada uno quede frente a otro.
- Después se colocan las fichas cara abajo y se desordenan con las manos hasta que se mezclen siempre sin voltearlas.
- Ahora todos deben tomar 7 fichas.
- Para comenzar, el jugador con la ficha más alta, que es el 6-6, la ubica en el centro de la mesa.
- Después el niño que está a su derecha debe conectar una pieza que también contenga un 6. Si no posee ninguna, pierde su turno y el siguiente a la derecha coloca su pieza.
Las fichas se conectan en ambas direcciones de la primera y después de la siguiente formando una hilera. El juego termina cuando un jugador ya no tenga más piezas que colocar. En ese caso él es el ganador.
Sin embargo, puede ocurrir que ambos lados de la fila tengan un mismo número y ya ningún jugador posea fichas de esa cifra. En esa situación se cuentan los números de las fichas y el que sume menos, gana.
Otras alternativas de juego
Otra manera de jugarlo es con solo dos jugadores y es el que más se recomienda para que aprendan los más pequeños de la casa. La dinámica de juego es la misma con unas pocas diferencias.
Se reparten 7 fichas y cada vez que un jugador usa una ficha toma una de las 14 restantes. También si alguno no tiene uno de los números de las fichas que está en juego debe tomar una y perder el turno.
Ahora bien, para que los más pequeños disfruten del dominó deben recurrir a alguna de sus variantes, ya que la combinación de estos números en niños menores 4 años resulta complicada y les aburre.
El dominó es el mejor juego de mesa para compartir con nuestro niño porque aprende y desarrolla sus habilidades psicomotoras mientras se divierte.
Buen día a tod@s!!